Esta receta de pie de limón es una de mis favoritas porque logra el equilibrio perfecto entre la acidez del limón, que suaviza el dulzor del merengue suizo, creando una combinación maravillosa para el paladar. La frescura se complementa a la perfección con la textura cremosa del relleno, mientras que el merengue aporta un toque ligero y esponjoso que eleva todo el postre. Cada bocado es una explosión de sabores que se balancean entre lo dulce y lo ácido, haciendo de este pie una verdadera delicia que siempre sorprende y encanta a quienes lo prueban.
Ingredientes:
Para la masa:
254 gramos de harina sin polvos de hornear
50 gramos de azúcar flor
100 gramos de mantequilla fría, cortada en cubos
1 huevo
Ralladura de un limón
Para el relleno:
4 yemas de huevo (reserva las claras para el merengue)
397 gramos de leche condensada
150 ml de jugo de limón (si te gusta con mucho sabor a limón le puede agregar hasta 170ml, en el caso que te guste con un sabor más sutil pueden ser 120ml)
Preparación:
Comenzamos con la base de nuestro pie de limón, una masa sable clásica y deliciosa:
En un bowl, coloca la harina y el azúcar flor. Agrega la mantequilla fría en cubos y, usando solo las yemas de tus dedos, comienza a aplastar los ingredientes hasta obtener una textura arenosa, lo que se conoce como un arenado.Luego, incorpora el huevo y la ralladura de limón, que le dará ese toque fresco tan característico de esta receta. Mezcla suavemente hasta formar una masa homogénea. ¡Ya tienes lista tu masa sable!
Para estirar la masa, utiliza mi técnica favorita, el sándwich de papel: coloca la masa entre dos papeles de hornear y estira con el uslero. Esto evitará que la masa se pegue y te permitirá trabajarla sin agregar harina en exceso. Engrasa bien el molde para el pie (puedes usar aceite en spray) y coloca la masa sobre él. Para retirar el excedente, corta con un cuchillo. Pincha la base con un tenedor para que durante la cocción el aire pueda salir uniformemente, evitando que se infle. Congelar por 15 minutos.
Ya pasado el tiempo lleva la masa al horno precalentado a 180°C por 12 minutos, hasta que esté ligeramente dorada.
Mientras la base está en el horno, preparamos el relleno,
En un bowl, mezcla las yemas de huevo, la leche condensada y el jugo de limón. Incorpora hasta que esté todo bien integrado y obtengas una mezcla cremosa y homogénea.
Vierte esta mezcla sobre la base ya horneada y lleva nuevamente al horno por 15 minutos más, o hasta que el relleno esté firme al tacto.
Cuando el pie esté completamente frío, desmóldalo y decóralo con un merengue suizo, la receta esta en mi perfil.
¡Y listo! Este pie de limón es el equilibrio perfecto entre la acidez del limón y la suavidad del merengue. Espero que disfrutes esta receta tanto como yo disfruto prepararla.
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